Prisly Ortiz | Product Owner

La transformación digital en las grandes empresas se ha convertido hoy en día en una realidad impostergable. El negocio nos demuestra que nos enfrentamos a dos grandes constantes: los cambios y los desafíos.

Para una empresa mantenerse actualizada debe dedicar recursos y esfuerzos en la adopción tecnológica. Esto implica la implementación de tecnologías digitales, mejora de procesos y una eficiente gestión del cambio. En este breve artículo, hablaremos sobre algunos retos que trae consigo la transformación digital.

Para generar una transformación digital exitosa, el mensaje debe ser claro y venir acompañado de metas de mediano y largo plazo que vayan acorde a la visión y estrategias del CEO.

Los ejecutivos deben creer en la transformación digital, estar conscientes de sus beneficios y comprometerse en apoyar y contagiar al resto de la organización en este proceso de cambio.

Gestión del cambio

Las empresas deben realizar una correcta gestión del cambio. Ya si bien es cierto que en muchos casos la tecnología sustituye la mano de obra, no es menos cierto que para la mayoría de procesos siempre será necesaria la intervención humana.

El miedo a ser reemplazado, la resistencia a un cambio en la forma de hacer las cosas, así como la poca disposición para adoptar nuevas herramientas de trabajo, son el punto de partida para diseñar un plan de gestión del cambio. Se debe estar preparado para evangelizar a grupos de usuarios con un alto contenido de predisposición y que están estancados en su zona de confort.

Definir estrategias que nos permitan efectuar una transición de gran impacto y relevancia, soportada en efectivas campañas de comunicación, con mensajes claros y audiencias bien definidas, es menester para garantizar el logro de las metas organizacionales.

Automatización

Las empresas que se coloquen en la ruta de la transformación digital deben ser conscientes de la necesidad de cambiar patrones tradicionales de trabajo, esto implica, entre otras cosas, mejoras a nuestras herramientas de trabajo y producción.

Esto implica la implementación de nuevas tecnologías digitales que generen un cambio de paradigma en nuestros espacios. La estrategia de adopción de nuevas tecnologías debe enfocarse en mejorar la eficacia en nuestros procesos, la productividad, reducción en costos, esfuerzos y mejorar la experiencia de nuestros stakeholders.

Otro reto derivado de la automatización, es garantizar la estandarización y adopción de las nuevas tecnologías. Los usuarios deben entender que estos cambios no son temporales, sino que deben formar parte de la nueva cultura de trabajo y que deben servir de agentes multiplicadores para el resto de sus equipos.

Recursos Digitales

Un proyecto de Transformación Digital impulsa a las grandes empresas a promover y desarrollar recursos digitales, esto hace referencia a formar a equipos de profesionales para que tengan un amplio dominio de habilidades y herramientas digitales que sean de uso diario y que les facilite la gestión.

A menudo, grandes y tradicionales empresas, se ven en la necesidad de tercerizar servicios profesionales, debido a la carencia de recursos con un nivel adecuado de adopción tecnológica. Para abordar un buen proyecto de TD, las empresas deben estar en la disposición de dedicar tiempo y esfuerzos en desarrollar recursos claves, que sirvan de apoyo en el logro de cada uno de los objetivos de la transformación digital.

La adquisición de habilidades y conocimientos tecnológicos, debe ser un compromiso a todos los niveles de la empresa. Debemos avanzar junto a la tecnología, no enfrascarnos en un enfoque reactivo que permea nuestra capacidad de adaptabilidad y respuesta.

El Usuario Final

Una empresa que se embarque en un proceso de transformación digital debe estar consciente que esto va a impactar en muchos casos la forma en que interactuamos con nuestros usuarios finales. En nuestro país esto constituye un reto importante, pues, si tratamos de cambiar la forma en que interactuamos con nuestros usuarios externos es probable que encontremos un alto nivel de resistencia.

Esto tiene su origen en lo que denomino “Folklorismo”, que hace referencia a usuarios que están acostumbrados a hacer las cosas siempre de la misma forma y porque así se las enseñaron. Esto genera gran resistencia al cambio, por el temor de tener que moverse fuera de su zona de confort.

Por otro lado, tenemos la carencia de habilidades tecnológicas de parte de nuestros clientes externos. Esto implica un gran reto, pues como empresa debemos tratar de que nuestro cliente adopte la nueva forma de hacer negocios sin impactar nuestra relación comercial.

La Transformación digital, es una carrera donde llega lejos el que tiene sus objetivos claros y el apoyo de su gente, no el que vaya más rápido ni el que tenga más recursos. La TD no es un capricho, no es una moda, es una necesidad, donde aquellas empresas que no evolucionen tendrán que enfrentarse al rechazo y al olvido.