Por: Mariany Pacheco | Gerente de Calidad MercaSID 

Con la globalización, la diversificación de los mercados y el avance tecnológico, se han facilitado enormemente los intercambios comerciales a nivel mundial, en consecuencia, surge la necesidad de establecer mecanismos de estandarización para los productos y servicios. Se requiere por tanto que los parámetros de calidad sean armonizados, regulados y que se hable el mismo idioma sin importar la procedencia de los productos a todos los niveles de la cadena de comercialización. 

Existe una nueva relación de oferta y demanda que trae consigo niveles de exigencias que han obligado al mercado a moverse en una misma dirección, la implantación de sistemas de gestión basados en normativas de estándares internacionales de calidad. En este escenario adquiere protagonismo la ISO, que es una federación internacional de normalización. En el campo de la evaluación de la conformidad, ISO y la Comisión Electrotécnica Internacional (IEC), desarrollan documentos conjuntos ISO/IEC. Se destaca que dentro del conjunto de normas ISO se encuentran la ISO/IEC 17025, cuyo principal objetivo es establecer los requisitos que deben cumplir los laboratorios de ensayos y calibración. 

Es cada vez más creciente el interés de los clientes en obtener servicios de laboratorios acreditados bajo la norma ISO/IEC 17025. Cuando un laboratorio demuestra conformidad con los requisitos en esta norma, recibe un reconocimiento a su competencia técnica añadiendo veracidad y validez a sus resultados. Este reconocimiento es de carácter internacional, responde a las exigencias de las entidades reguladoras, dota al laboratorio de un alto grado de credibilidad ante sus clientes y altos niveles de competitividad técnica. 

Una vez que se obtiene la acreditación, se demuestra que el personal cumple con los requisitos de competencia, que las instalaciones y los equipos son adecuados, estando estos debidamente calibrados y mantenidos. También asegura que los ensayos se ejecutan utilizando métodos y procedimientos normalizados para el uso previsto mediante un proceso de verificación y/o validación, utilizando instrumentos eficaces de seguimiento y medición. 

Beneficios de los laboratorios con acreditación en ISO 17025

• Mayor competitividad. 
• Resultados que superan las barreras técnicas internacionales. 
• Otorga al laboratorio una elevada competencia. 
• Facilita el cumplimiento con normativas legales y reglamentarias. 
• Las actuaciones y toma de decisiones a lo interno del laboratorio poseen un aval metrológico confiable. 
• Ofrece una apertura a mercados internacionales. 

En la actualidad la ISO reúne a más de un millón de empresas y organizaciones en más de 170 países miembros alrededor del mundo. Estas cifras predicen que este número seguirá creciendo de manera exponencial y cada vez serán más las empresas que se unan al tren de la calidad. 

Grupo SID, con sus empresas de vanguardia y de proyección internacional, comprometidas con la innovación y la calidad, asume el reto de cumplir con los estándares requeridos para acreditar las actividades de sus laboratorios, enarbolando los principios de excelencia y diferenciación con el único objetivo de lograr la máxima satisfacción de nuestros clientes.